viernes, 31 de enero de 2014

Soldaditos de Pavía al estilo Raquel

Existen varias teorías sobre el origen de su nombre. Una de ellas dice que el nombre de Pavía se debe a que
el color recuerda al del uniforme de los húsares de los tercios españoles que combatieron en la Batalla de Pavía en 1515, en la que las tropas españolas de Carlos V derrotaron a los soldados franceses de Francisco I. La decoración del pimiento rojo simula los galones con los que fueron condecorados los soldados.
Los soldaditos de Pavía son unas largas tiras de bacalao (el bacalao de molla que no tiene ni piel ni espinas), que se rebozan en harina y huevo, se fríen y se les coloca por encima una tira de pimiento rojo.
Son un aperitivo típico madrileño y de algunas zonas de Andalucía. Dicen que fueron concebidos en una taberna de la calle Tetuán en Madrid. En algunas tascas y bares se suelen servir fríos acompañados con vino. En Andalucía se puede encontrar el bacalao sustituido por merluza y se conocen simplemente como 'Pavías'.



  • Ingredientes:

500 gr Bacalao desalado
Zumo de 1 Limón
Harina y 1 ó 2 Huevos para rebozar
Aceite de Oliva para freir
1 Lata de Pimientos del Piquillo
Sal (opcional) yo no la echaría pero eso a gusto de cada uno


  • Elaboración:

  1. sI el trozo de bacalao es fino o si viene cortado en tiras se pone a remojo un día, y si el trozo es grueso se pone a remojo 2 días y se le debe cambiar el agua 2 ó 3 veces para quitarle el exceso de sal. En caso de que tenga piel se pone a remojo con esta para arriba.
  2. Una vez desalado se le quita la piel si se quiere, eso a gusto de cada uno, y se corta en tiras que se ponen en un recipiente con el zumo de limón y se reserva.
  3. Se prepara en un cuenco la harina y en un plato los huevos batidos. En una sartén echamos abundante aceite de oliva y lo ponemos a calentar. Se escurren las tiras de bacalao y cuando el aceite esté caliente pasamos las tiras de bacalao por harina y huevo y las freímos de poco en poco para que no baje la temperatura de éste.
  4. Cuando adquieran un color doradito se retiran del fuego y se ponen en un plato con papel de cocina para quitar el exceso de aceite.
  5. Una vez frito todo el bacalao se cortan los pimientos del piquillo en tiras y las colocamos por encima de el bacalao. Ya tenemos listos los 'Soldaditos de Pavía'.
NOTA: en vez de rebozarlos en harina y huevo, podemos hacerlo en una pasta orly, que para esta receta usaríamos 160 gr Harina, 14 cucharadas Agua fría, un poco de sal (a gusto de cada uno),  10 gr Levadura de panadero y 2 cucharadas Aceite de oliva. Se disuelve la levadura en el agua fría y se reserva. En un cuenco echamos la harina, hacemos un hueco y añadimos la sal (opcional), el aceite y la mezcla de agua y levadura de panadero. Se mezcla todo, lo tapamos y dejamos crecer la masa en un sitio templado unos 10 minutos mas o menos. Cuando el aceite esté caliente vamos bañando las tiras de bacalao y friéndolas.

Bon Apettit!!

jueves, 30 de enero de 2014

Pastel de Zanahoria y coco al Estilo Raquel

Las zanahorias se han usado en pasteles desde la Edad Media, ya que por aquel entonces los endulzantes
eran escasos y caros, mientras que la zanahoria, que contiene más azúcar que cualquier otro vegetal excepto la remolacha azucarera, era mucho más fácil de encontrar. La popularidad del pastel de zanahoria resurgió probablemente en el Reino Unido durante el racionamiento en el transcurso de la Segunda Guerra Mundial.
Los pasteles de zanahoria estuvieron ampliamente disponibles en restaurantes y cafeterías estadounidenses a principios de los años 60. Al principio eran un artículo novedoso, pero a muchas personas les gustó tanto que pasó a ser un postre corriente.

  • Ingredientes:

200 gr Zanahorias ralladas finamente
150 gr Azúcar Moreno
200 gr Harina
100 gr Aceite de Olvida
1 Sobre de levadura Royal
5 gr Canela en polvo
3 Huevos
50 gr Coco rallado
Mantequilla para engrasar el molde


  • Elaboración:

  1. Batimos los huevos con el azúcar hasta que tenga un poco de consistencia. Añadimos poco a poco el aceite y el resto de ingredientes y mezclamos bien. La harina, previamente tamizada, la añadimos en último lugar y la echaremos poco a poco para que no salgan grumos. Mezclamos con cuidado hasta que resulte una mezcla homogénea.
  2. Precalentamos el horno 10 minutos a 180ºC.
  3. Engrasamos el molde con la mantequilla y vertemos la mezcla. Introducimos al horno durante unos       25 - 30 minutos a 180ºC. Para saber si está listo pincháis con una puntilla el pastel y si sale limpio es que ya está listo.
  4. Una vez fuera de horno lo desmoldamos con cuidado y lo dejamos enfriar en una rejilla. Cuando esté frío lo cortamos por la mitad y lo rellenamos con el glaseado que os pondré a continuación. Este mismo glaseado nos servirá para adornar también el pastel.

  • Glaseado:
175 gr Queso de untar tipo Philadelphia        
150 gr Mantequilla                                        
150 gr Azúcar Glasé                                      

-Mezclar los ingredientes, la mantequilla ablandada y se baten hasta conseguir una mezcla homogénea. Cuando el pastel esté frío se rellena y se decora.


NOTA: podéis adornar el glaseado con piel de naranja rallada para darle un poco de color al pastel.


Bon Apettit!!

domingo, 19 de enero de 2014

Margarita de Chocolate y Nueces al estilo Raquel




Este pan dulce es una variación de los 'Bollos de Chelsea' que originalmente son de especias y pasas.
Se inventaron en el siglo XVIII , en La Casa Bun Chelsea en Londres, donde su popularidad hizo que llegarán hasta la realeza donde tuvieron un gran éxito, pero éstos se hacían en forma de rollos.





  • Ingredientes:


2 Sobres de levadura seca de panadería                  
440 gr Harina
2 huevos + 1 para pintar la margarita                      
5 gr Sal
100 gr Mantequilla + un poco para el molde          
160 gr Leche
80 gr Azúcar                                                                        
60 gr Pepitas de chocolate y 100 gr Nueces


  • Elaboración:



  1. Calentar la leche junto con la mantequilla, hasta que esta se derrita. Dejar que temple y añadir una cucharada del azúcar y los 2 sobres de levadura seca de panadería, tapar con un paño y dejar reposar 10 minutos.
  2. En un bol ponemos la harina tamizada, el azúcar restante y la sal, mezclamos bien y hacemos un volcán en el centro. En ese volcán echamos la mezcla que dejamos reposar 10 minutos y le añadimos 2 huevos. Amasamos todo bien sobre una superficie enharinada unos 20 minutos, hasta que veamos que la masa no se
    nos pega mucho a los dedos.
  3. Hacemos una bola con la masa, la metemos en un bol grande untado con un poco de aceite de girasol, le damos un corte en cruz, la tapamos con un paño, dejándolo reposar 1 hora, hasta que doble su volumen.
  4. Cuando esté lista la masa le sacamos el aire golpeándola suavemente sobre una superficie enharinada, la estiramos un poco con un rodillo y añadimos las pepitas de chocolate y las nueces, amasamos un poco para que queden bien repartidas y después formamos bolas (en
    mi caso yo formé 6 bolas y con la masa que me
    sobró hice un pan, como se vé en la foto).
    Las bolas las colocamos en un molde para
    horno, previamente untado con mantequilla, y
    se deja reposar 1 hora.
  5. Precalentamos el horno a 180ºC 10 minutos antes de introducir el molde al horno.
  6. Pintamos con huevo batido la masa y horneamos uno 20-30 minutos a 180ºC. Para saber si está listo se pincha con una puntilla y si sale limpia la masa está cocida por dentro.
  7. Una vez fuera de horno dejamos enfriar sobre una rejilla.

NOTA: si vemos que la superficie se nos está dorando en exceso dentro del horno, tapamos con papel de aluminio sin aplastar la superficie.

Bon Appetit!!

martes, 7 de enero de 2014

Nevaditos y Morenitos al estilo Raquel





La mayor parte de la repostería en España es una herencia de la cultura musulmana que se conservó gracias a los conventos, monasterios y artesanos pasteleros que con el tiempo fueron perfeccionando las técnicas de elaboración pero sin profanar la receta original.
Los árabes nos trajeron la caña de azúcar y nos enseñaron a refinarla, nos enseñaron a hacer mazapanes, turrones, alfajores... Y también nos trajeron de Europa el hojaldre entre muchas otras cosas más.




  • Ingredientes:


320 gr Harina                                        
1 cucharada Aceite de Oliva
100 gr Manteca de cerdo ibérico        
75gr Vino Blanco
60 gr Azúcar                                          
1/2 cucharadita de sal
Azúcar Glass (para decorar)              
Cobertura de chocolate (para decorar)



  • Elaboración:

  1. En un bol hacemos un volcán con la harina (previamente tamizada), el azúcar y la sal. En el centro le echamos el vino, el aceite de oliva y la manteca cortada en dados. Amasamos muy bien hasta que resulte una masa homogénea. Hacemos una bola, la envolvemos con film y la metemos en la nevera unos 15-20 minutos.
  1. Pre-calentamos el horno 10 minutos a 160ºC.

  2. Estiramos la masa con ayuda de un rodillo, la dejamos a 1 cm de grosor (yo suelo colocar papel film en la superficie donde voy a trabajar la masa y también envuelvo mi rodillo en film para que no se me quede pegada) y con un cortapastas redondo vamos cortando porciones.

  3. Vamos colocando las porciones de masa en la bandeja del horno encima de un papel sulfurizado o de horno, no muy pegadas porque crecen un poco con el calor.

  4. Horneamos unos 35 minutos más o menos a 160ºC. Al finalizar la cocción los colocamos sobre una rejilla y cuando enfríen a unos les espolvoreamos bastante azúcar glass y a otros, derretimos un poco de cobertura de chocolate al baño maría y los bañamos en ella dejándolos secar después sobre la rejilla.

NOTA: estas pastas no deben dorarse en exceso porque amarga su sabor. Si las guardáis en un tapper hermético o en una caja metálica para galletas os aguantarán varios días.

CONSEJO: es mejor que los preparéis el día antes de comerlos porque están muchísimo mejor pasando uno o dos días ya que se potencia el sabor y se armonizan los ingredientes.

Bon Appetit!!

lunes, 6 de enero de 2014

Bizcocho de manzana al estilo Raquel

Tanto el bizcocho como la tarta de manzana se pueden hacer de infinitas formas, con diferentes masas, la manzana se puede usar en compota, mermelada, en trozos, cortada en gajos... Se puede aromatizar con diferentes ingredientes, pero el más común es la canela, que le dá ese toque tan especial.
 En mi receta utilizo aceite de oliva no de girasol y un toque de canela. Y pensaréis '¿por qué le añade aceite de oliva? le quitará sabor al bizcocho porque es muy fuerte...'
El aceite de oliva en esta receta es muy importante porque mezclado con el sabor de la manzana y la canela, le dá un sabor único. Os lo recomiendo 100% no lleva mucho tiempo hacerlo y está buenísimo.



  • Ingredientes:

400 gr Harina              
100 gr Aceite de Oliva
4 Huevos                        
1 sobre y medio de levadura Royal
160 gr Azúcar              
1 cucharadita de Canela
100gr Leche                  
1 Manzana (a poder ser Golden)
1 pizca de Sal              
Mantequilla para engrasar el molde
Ralladura de limón


  • Elaboración:
  1. Batimos los huevos junto con el azúcar con una varilla hasta que cojan un poco de consistencia. Añadimos la ralladura de limón, la pizca de sal, la canela, la leche, el aceite de oliva y mezclamos bien. A continuación añadimos la harina junto con la levadura ( previamente tamizadas) poco a poco y mezclándolo muy bien y con mucho cuidado para que una vez en el horno nos suba el bizcocho y no se quede chafado.
  2. En un bol echamos agua con unas gotas de zumo del limón que usamos para la ralladura. En él iremos echando los gajos de manzana cortados finos, previamente pelada la manzana y descorazonada. Esto es para que no se oxíden. Los reservamos.
  3. Pre-calentamos el horno 10 minutos a 175ºC.
  4. Mientras calienta el horno, derretimos un poco de mantequilla y untamos el molde para el bizcocho, vertemos en él la masa y por encima de esta vamos colocando los gajos de manzana bien escurridos. Podemos colocarlos en forma de espiral que queda muy bien, o como más nos guste.
  5. Horneamos unos 20-30 minutos a 175ºC. Para saber si el bizcocho está listo lo pinchamos por el medio con ayuda de una puntilla, si vemos que sale limpia está listo, si sale manchada de masa es que todavía le falta cocción.
  6. Una vez haya enfriado el bizcocho, podemos pintarlo por encima con un poco de mermelada de manzana (si está hecha en casa mucho mejor). Si no tenéis mermelada de manzana podéis usarla de albaricoque o simplemente dejar el bizcocho tal y como está. De todas las formas estará muy rico.
NOTA: si vemos que el bizcocho dentro del horno se nos está dorando en exceso por arriba, lo cubrimos con papel de aluminio, pero sin apretar la superficie del molde para que suba el bizcocho.


Bon appetit!!      

jueves, 2 de enero de 2014

Raxo al estilo Raquel

El Raxo es un clásico de la cocina gallega. A parte de un adobo es una forma de conservar la carne por un tiempo. Se supone que a los dos días de tenerlo adobando los principios activos del adobo cumplen las funciones de desinfectante, antioxidante, bactericida... de una forma totalmente natural, por lo tanto la carne queda libre de toda impureza y se puede proceder a su preparación. Antigüamente como en las casas no había neveras ni congeladores el Raxo una vez listo se solía dejar en la 'fresquera' metido en una cazuela de barro cubierto con la grasa de la fritura, donde permanecía hasta una semana. Pasado ese tiempo ya se consumía.

Tradicionalmente para adobar el Raxo se usaba manteca blanca de cerdo que luego se derretía, se filtraba por un paño y se usaba como aceite, pero, aunque estaba muy rica, se enranciaba con mucha facilidad y la aparición de moho no falicitaba mucho las cosas... por lo tanto se sustituyó por el aceite de oliva.


  • Ingredientes:
1kg cinta de lomo (un trozo entero)      
Molinillo de pimientas
1 vaso de vino albariño                            
Orégano, albahaca, romero, tomillo y laurel
Aceite de Oliva                                              
4 Dientes de ajo
Pimentón de la Vera a poder ser          
Sal

  • Elaboración:
  1. Cortamos en filetes gruesos, de unos 2cm de grosor, la cinta de lomo y luego cortamos en tiras y cada tira en dos o en más cachos, (como más os guste) pero recordar que en la sartén encongerán y que deben ser todos los trozos del mismo tamaño.
  1. Colocamos la carne en un bol o bandeja de cristal y la adobamos; pelamos y machacamos los ajos dándoles un golpe seco con la puntilla y los incorporamos a la carne, echamos el vino, las especias (sin abusar), con el pimentón ser un poco generosos, añadimos un buen chorro de aceite de oliva y sal un poco más de lo acostumbrado pero siempre sin pasarse. Lo tapamos con papel film (si no tenemos film usamos papel de aluminio) y lo dejamos en la nevera 1 día.
  2. En una sartén grande echamos un poco aceite de oliva, escurrimos muy bien la carne (todo el caldo del adobo lo reservamos porque lo utilizaremos al final) y le damos un golpe fuerte de calor para que dore por fuera y quede cruda por dentro, unos 3 minutos más o menos, pasado este tiempo añadimos el adobo reservado, rectificamos de sal (si hiciera falta) y dejamos cocer a fuego medio unos 6 minutos y listo para comer.
  3. Este plato se suele acompañar con patatas fritas, aunque cada uno puede acompañarlo con o que quiera.
NOTA: antes de dorar la carne podéis cortar en láminas unos ajos y dorarlos en la misma sartén, cuando doren los sacáis, los reserváis y al final cuando falte 1 minuto para tener el Raxo listo los echáis en la sartén.


Bon appetit!!